Descripción

Las empanadillas son una receta muy apropiada para aprovechar restos de comida, igual que ocurre con las croquetas. Podemos hacerlas de múltiples formas, según el relleno que hagamos con las sobras que nos hayan quedado, o bien con una elaboracion ex profeso para ello. Yo suelo hacerlas de queso, cuando quedan varios pedazos que van quedando duros y que no se pueden usar en otra cosa. Los desmenuzo con el rallador y hago una mezcla con la que relleno las obleas. También se pueden hacer de pisto, o de boloñesa. En el caso de la receta de hoy es una preparación especifica de mi recetario…

En primer lugar haremos la masa para las obleas. Utilizaremos 350 gr de harina floja, 150 cl de aceite y otros tantos de agua, y una pizca de sal. Pondremos el agua y el aceite al fuego durante tres minutos para calentarlo. Cuando esté a punto echamos la harina y la sal y removemos todo bien, formando la masa. La dejamos enfriar y la extenderemos con un rodillo, colocándola entre dos papeles de horno, lo mas fina posible. Haremos las obleas con un corta pastas y recortamos el papel del horno alrededor, para ayudarnos cuando llegue el momento.

En una sartén ponemos tomate a freír, el cual habremos rallado previamente. Cortamos en bonito en la tabla con el cuchillo, muy picado, como si fuéramos a hacer un tartar. Cuando el tomate esté bien frito, agregamos el bonito y morrón picado también. Corregimos de sal y dejamos hacerse diez minutos.

Rellenamos las obleas con el contenido de la sartén y las cerramos doblando las sobre si mismas, humedeciendo el borde previamente y apretando con un tenedor para hacerle el dentado característico.

Freimos en abundante aceite de oliva dandole vuelta de vez en cuando para que ambas caras queden del mismo tono. Si no queremos hacer la masa, o no tenemos tiempo, podemos usar las de La Cocinera, que son las mas parecidas a las de la receta.