Descripción

En contra de la creencia popular que sitúa su origen en Estados Unidos, las tortitas o pancakes tienen su origen en Rusia, aproximadamente en el Siglo IV después de Cristo, en la época de Semana Santa. En este periodo del año, en la Cuaresma, la Iglesia pedía a sus fieles el ayuno durante el período de cuarenta días de la preparación de la muerte y resurrección de Jesús. A la prohibición de comer carne, se añadía la de tomar alimentos como huevos, leche, queso y otros. A raíz de esto nacen los pancakes cuando los fieles se alimentaban con una pasta a base de harina de trigo y agua que se extendía en capas finas sobre una superficie caliente para cocinarlo. Cuando se eliminaron las prohibiciones y la Iglesia autorizó a incluir en la dieta elementos como huevos, leche, azúcar y mantequilla nacen los pancakes que hoy conocemos. La emigración al nuevo mundo llevó la receta a América, que se difundió rápidamente por el territorio al ser una elaboración muy asequible de preparar, dada la simplicidad, facilidad de encontrarlos y bajo precio de los ingredientes.

Para preparar las Tortitas americanas o pancakes, simplemente mezclamos todos los ingredientes en un jarro, ayudándonos de la batidora, que iremos vertiendo en una sartén engrasada con mantequilla, formando una tortilla, y dejando cocer hasta que aparezcan unos pequeños agujeros en la superficie, momento en el que daremos la vuelta a la tortita. No debemos olvidar volver a engrasar con mantequilla la sartén en cada vertido.

La servimos formando una pila en el plato. Esta receta es ideal para las tardes de frío, en las meriendas del invierno, acompañando las tortitas con nata montada y sirope de caramelo o chocolate. También pueden usarse para confeccionar recetas saladas como base.

Nota: las cantidades de la receta es para unas tres o cuatro tortitas para un comensal.