Durante mucho tiempo hemos vivido una expansión de los negocios de hostelería y restauración basados en la fórmula del fast food, los cuales han aportado a nuestra sociedad un concepto de ocio y alimentación, pero con una beneficios para la salud más que cuestionables. Hamburguesas, bocadillos, pollo frito y otras especialidades similares han sido la oferta de estos establecimientos, presentados con una fórmula de menú combinado con bebidas y guarnición de patatas fritas, aros de cebolla, y lo que es más importante, algún regalo en forma de juguete para el público infantil. Si además disponen de una área de juegos, el éxito está asegurado.
Los detractores de este tipo de establecimientos argumentan que la calidad del producto es mínima, ya que debe aportar una rentabilidad elevada con un precio de venta lo más ajustado posible, con lo cual las materias primas y los ingredientes usados son de segunda o tercera categoría. Esto conlleva que los aportes nutricionales y los elementos ingeridos presenten altas dosis de grasas saturadas, elementos transgénicos y otros que, en conjunto, convierten esta comida en una bomba calórica poco saludable.
Así mismo, la estrategia comercial de estos locales esta basada en la alta rotación de las mesas, dado que a mayor número de comensales por turno, mayor facturación, y así, todo en el establecimiento está pensado para agilizar el cambio de público. Música ambiente con un ritmo rápido, autoservicio de la comida, producto semielaborado para agilizar la comanda, asientos rígidos, y lo más reciente, cajas de autocobro para evitar las colas. Todo esto provoca al cliente un estrés inducido para que permanezca en el local el menor tiempo posible.
Frente a este tipo de establecimientos ha nacido un movimiento que aboga por la cocina tradicional, sana, saludable y servida en un entorno que permita deleitarse con la misma y disfrutar de un momento de experiencia culinaria que perduré en la memoria del comensal. El movimiento Slow Food tiene cada vez mas presencia e implantación a nivel internacional. En España va creciendo y expandiendose por todo el territorio. En sus postulados están el convertir el momento de la comida en un momento para el disfrute. Puedes encontrar más información sobre este concepto en la web oficial de la organización… www.slowfood.es