El logotipo de Arranz Gastrocultura define perfectamente la historia de su fundación con la simbología que refleja. El racimo representa la gastronomía, ya que la uva puede ser alimento y bebida, evolucionada como vino desde el mosto original.
Ese proceso representa también la metamorfosis de mi propia vida, en la que en su ecuador tuve que enfrentarme a un cambio que me obligó a dar un giro radical en lo personal y lo profesional. El racimo tiene doce uvas, ya que la decisión de poner en marcha este proyecto se fraguó en el mes de diciembre, con una fecha tope para su finalización del día 31, que como ya imaginarán, se celebra tomando las doce uvas tradicionales, dando lugar a un nuevo periodo de tiempo.
El escobajo del racimo tiene un resto de sarmiento que representa en su espiral la lógica duda que constantemente hace pensar si se está actuando correctamente, ya que sólo los necios tienen la certeza y el conocimiento de todo; el sabio duda de su propio conocimiento...